jueves, 5 de enero de 2012

Derrocando a Disney: Muerte y renacimiento de ilusiones.

Es curioso cómo a veces, cuando escribo sobre un tema en el blog, a cada entrada se va radicalizando... Le empiezo a dar más vueltas y...
Esto es una continuación de las dos entradas anteriores a "Feliz solsticio".

Me gustan las películas de Disney, pero últimamente pensando... he decidido que no se las pondría demasiado a mis hijos... no comparto bastante de la educación que pueden aportar. Representa demasiado el paradigma de vida occidental... chicas han de ser princesas (lujos incluidos), los príncipes son atractivos (en el mundo real, quien se dedica demasiado a ser atractivo suele andar corto en otros aspectos...) (y... lujos incluidos :3)...
Pero lo que decidí que me revienta... es que siempre tienen que acabar juntos... siempre.

Por eso preferiría intercalarlas entre películas de Hayao Miyazaki. Los príncipes y princesas buenos se miden 100 veces más en virtudes que en lujos. Y... dejándome de rodeos anticapitalistas... no todos "se llevan a la chica"...
Algunos se conforman radiantes de felicidad con haber podido conocerla y vivir aventuras con ella, a pesar de que haya elegido a otro; otros deciden esperar para dedicarse su compromiso, pues aún hay entuertos que desfacer (no pongo ejemplos para no hacer spoiler)

¿Seve ya por donde voy?
Me pregunto si... si no nos pusieran tantos estereotipos de pequeños, no veríamos tanto la búsqueda de pareja como una obligación en la vida, y más como la aventura que es y debería ser.
Parece que si no encontramos una pareja estable a quien dedicar toda la vida, atención y fidelidad, estamos haciendo algo mal... Es como un deber, todos lo hacen, es lo que hay que hacer...
Lo importante es el camino... la emoción de la búsqueda, el viejo placer de conquista, la contemplación de las hermosura del tesoro...

Y ahora además pienso... ¿porqué la mayoría de las películas narran el cómo "chico conoce a chica" y finaliza con la boda? Lo dicho, lo interesante, el desarrollo de las ilusiones...

Enlazando ya con mi vida personal...
Lo que pienso es que se ha reducido enormemente mi interés en tener pareja...
Es una radicalización de la penúltima entrada.
Mi dosis de cariño y comprensión puedo recibirla de buenas amistades; la admiración... no estoy falto de musas; mi.. ejem.. vida sexual... sencillamente: me importa un bledo, no siento la necesidad, así que no tengo prisa alguna...

No es como un solterón de oro que no quiere atarse para calzarse a quien quiera y no tener compromisos, hablo de atarme por igual a cada persona que lo merezca, conquistando la confianza de quien merezca el esfuerzo.
En caso de tener una relación, al menos desearía que no fuese una convencional. Que se asuma desde el principio que en cierto momento los caminos han de poder separarse (los caminos, no el contacto) para descubrir más joyas del mundo. Disfrutar una relación como compañeros, o como amantes si cabe... pero no eterna...
Esa persona siempre permanecería en mi memoria cuando toque vivir su ausencia, persiga a quien persiga después.


No quiero que mi sed de aventura y contemplación haga daño a nadie... Las ilusiones han de ser caminos, no anclajes y cadenas.

"Tú, chica, puedes vivir una vida de hogar. Búscate un marido con miedo a volar.
No hables de futuro, es una ilusión, cuando el rock&roll conquisto mi corazón" (Loquillo)

[PD: recomiendo leer también el primer comentario dejado en esta entrada]

2 comentarios:

  1. YAYYYYYY es curioso que escribas esta entrada. Yo este último año me he dado cuenta de muchas cosas al respecto. De que en general todos buscamos la felicidad en algo concreto externo a nosotros: en tener una pareja determinada, un piso, un trabajo... Y que si no conseguimos estas "necesidades" que nosotros mismos nos hemos impuesto, no somos felices.
    Me produce mucha tristeza ver a tanta gente triste, yendo al psicólogo, con el gran problema existencial de no tener pareja. O de que esta no sea como lo habían imaginado. También me da pena ver como muchos se plantean salir con alguien por el mero hecho de salir con alguien, sin sentimientos de por medio ni nada.
    Creo que la felicidad no se puede colocar en algo externo, que no va a llegar nadie a implantarla en nuestra vida. Creo que la debemos buscar nosotros en nuestro interior, conocernos a nosotros mismos. Y es algo más dificil, sí, porque... quién te enseña a ti la forma de "conocerte", de "quererte"? quién te enseña a ti a ser feliz? Sin duda son preguntas difíciles de responder, pero el simple hecho de que te las preguntes es buena señal, ya que indica que no estás esperando pasivamente a conseguir un piso de 100 metros cuadrados.
    Y con esto no quiero decir que esté en contra de las relaciones. Al contrario, creo que una vez que encuentras la felicidad en tu interior has de compartirla. Y al compartirla, se hará mayor y en cierto modo más real.

    Cielos, no quería escribir tanto xDDD
    Una última cosa.. cada vez que tengo oportunidad recomiendo la pelicula "Into the wild" asi que si tienes algún hueco estos días veela! A lo mejor piensas que no tiene mucho que ver con el tema de la entrada etc, pero a mi me hizo pensar muchísimo en la felicidad y en la forma de ver la vida...

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  2. La gente busca pareja porque la gente busca el "triunfo" en todas las partes de la vida. Tener un buen trabajo, una casa enorme y una mujer atractiva que le espere al llegar a casa. Maslow lo llamó la "Pirámide de las Necesidades Básicas", pero te doy libertad para que le pongas el nombre que más te convenza.

    Con nuestra edad la gente tiene resuelto el tema de alimento y vivienda (con sus padres, evidentemente) y como el tema de buscar un buen trabajo está limitado a nuestros estudios (Y por tanto, todo aquello que tenga que ver con libertad económica) tienden a buscar eso que ven más fácil de que se consiga: Su "Príncipe azul".

    ¿Qué se suele ir a por los desteñidos? Pues sí, pero es que esos salen mucho mejor en las fotos del tuenti y puedes fardar con la Jenny sobre lo guapo que era.

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